Creo que debemos tratar de comprender el proceso sociopolítico que ha desembocado en la cuasi destrucción de nuestra nacionalidad así como de nuestra capacidad de defensa como pueblo.
Todos sabemos sobre la Era de Trujillo y que el ajusticiamiento del tirano inició el proceso fallido que hoy vivimos resultado de múltiples errores cometidos por diferentes sectores de nuestra sociedad. Si nadie se equivocó no deberíamos estar en la encrucijada en que estamos y si nos equivocamos debe aceptarse para poder iniciar el proceso de rectificación.
La oposición a Trujillo
Debemos entender que el sector oligárquico se opuso de forma pasional a Trujillo por que éste no pertenecía a ninguna de las familias de la aristocracia "colonial" a la que habían pertenecido los anteriores gobernantes. Creo necesario decir que si existe una aristocracia no es por maldad sino porque esa fue la organización social de los colonizadores.
Nuestro primer presidente Tomás Bobadilla y Briones presidió la junta gubernativa por solo 2 meses para traspasarle el poder a Pedro Santana Marques de las Carreras.
Un sobrino de Pedro Santana Familias (1801-1864) casó con una nieta de Tomás Bobadilla Briones (1785-1871). Pedro Santana Familias fue presidente de la Junta Central Gubernativa desde el 13 de julio de 1844 hasta el 29 de agosto de ese mismo año. Posteriormente ocupó la presidencia de la República, en cuatro períodos, entre los años de 1844 y 1861 y así comenzó nuestra era pseudo republicana.
Nuestra primera independencia fue parte de la misma realidad. Dice Frank Moya Pons en su Manual de Historia Pág. 213 lo siguiente: “En ese entonces ya Sánchez Ramírez había muerto y gobernaban la colonia interinamente el Coronel Manuel Caballero y el Lic. José Núñez de Cáceres, este último con el cargo de Teniente de Gobernador e Intendente Político”. Traemos este pasaje a colación para documentar que Núñez de Cáceres era parte del gobierno colonial y que cuando el 1 de Diciembre de 1821 declara la independencia del Haití Español, como le llamaron, (hoy le hubiéramos denominado un autogolpe) era con la clara intención de colocándose bajo el protectorado de La Gran Colombia, mantenerse en el poder sin cambios radicales en el orden social.
Dejaré el link y si alguien desea corroborar esta afirmación lo invito a verificarlo en la página del Instituto Dominicano de Genealogía Inc. en el siguiente link: https://www.idg.org.do/capsulas/octubre2005/octubre200515.htm.
Un ejemplo de discriminación fue confirmado arriesgadamente con las bolas negras que impidieron a Trujillo pertenecer al Centro de Recreo de Santiago y al Club Unión de Santo Domingo. Esa misma discriminación se volvió a manifestar contra Juan Bosh y su gobierno calificándolo de Oclocracia (gobierno de la plebe) al otro día de las primeras elecciones en muchas décadas. Bosh tampoco pertenecía a ningún apellido consagrado y ahora se me ocurre que tampoco Juan Pablo Duarte ni Ramón Matías Mella y muchísimo menos Francisco del Rosario Sánchez a quienes no se les permitió gobernar. Siempre he sostenido que las diferencias entre el norte y el sur de América se originaron en que el primero fue colonizado y el segundo fue conquistado pero hay otra gran diferencia, los peregrinos que emigraron a Norteamérica fueron los perseguidos, los que sufrieron las represiones del poder aristocrático y religioso de Europa, en el sur llegaron los que pertenecían a esa aristocracia o simplemente aspiraban a pertenecer. Los primero no querían que se repitiera la situación opresiva mientras en el sur se quería perpetuar.
Antes de que Bosh tomara posesión se inició el plan para derrocarlo. Un golpe de estado ejecutado a los 7 meses y que gracias al viciado análisis de las izquierdas revolucionarias lograron exculpar y mantener la vigencia política del sector golpista ya que en su eterno esfuerzo de culpar al enemigo designado, el imperialismo yankee, se le atribuyo la culpa del atropello contra la legalidad y la democracia siendo falso. El sector golpista se tomo el trabajo y la inversión de recursos en una campaña que se llamó Mítines de Reafirmación Cristiana dirigidos a convencer, no a ellos mismos ni a los militares que ya estaban convencidos y mucho menos al pueblo cuya voluntad no contaba para ellos, sino al gobierno de Kennedy de que el pueblo temía la instauración del comunismo tal como acababa de ocurrir en la Cuba fidelista y convencieron al gobierno norteamericano de aceptar su tropelía y romper el orden democrático legal.
Esa acción trajo lógicamente una reacción contraria en defensa del legítimo proceso institucional de la nación que todos aspirábamos, un movimiento cívico militar cuya única finalidad fue reponer a Juan Bosh en la presidencia, movimiento dirigido por José Francisco Peña Gómez y algunos dirigentes del PRD. Es necesario dejar constancia de que la izquierda revolucionaria estuvo completamente al margen de la conjura y también es necesario decir que si la palabra revolución hubiese estado presente en las negociaciones no se hubiera conseguido el respaldo militar.
El plan era simple traer a Bosh desde Puerto Rico y ya reinstalado en el palacio invocar el respaldo de los organismos internacionales para el gobierno legítimo.
Debo mencionar que todo el movimiento fue acelerado extemporáneamente por otra conspiración neo trujillista que planeaba restaurar al presidente designado por Trujillo y derrocado por el pueblo en 1961 Joaquín A. Balaguer Ricardo.
En ese punto histórico Juan Bosh haciendo galas de su cobardía característica se negó a regresar en el avión militar que se envió a buscarlo y ese acto de traición a los planes acordados permitió que otro sector militar reaccionara originando la guerra civil de 1965 que trajo como consecuencia directa la intervención militar norteamericana.
La izquierda revolucionaria lógicamente se integró a lo que se convirtió en un movimiento armado del pueblo transformado en guerra patria por la intervención y rebautizaron de nombre una guerra civil en una nunca pensada revolución de abril. Un acto de oportunismo comprensible en la década del 60 donde cualquier liberación era asociada con la revolución y más aún con la sangre todavía fresca del masacrado levantamiento del 1J4 en las Manaclas comandado por una de las figuras más destacada y carismática en la lucha contra la tiranía primero y contra el golpe de estado después, Manolo Aurelio Tavares Justo
Esa transformación oportunista de la guerra civil a guerra revolucionaria tuvo consecuencias: estigmatizó como comunistas a los militares patriotas que participaron en la conjura sin serlos, hecho que conllevó a su persecución internacional y eliminación física de la mayoría y más importante eliminó cualquier ascendencia de la sociedad civil sobre el sector militar, dicho de otra forma alejó a los militares de cualquier compromiso social. Ningún militar se volverá a casar con la gloria.
El sector oligárquico cometió errores contra el proceso legítimo, un error grave y producto de la ceguera generada por su odio personal a Trujillo fue asumir que todo el pueblo estaba contra Trujillo siendo falso, lo que originó la hábil respuesta de Juan Bosh del "borron y cuenta nueva" que lo llevó a un triunfo casi imposible para establecer el gobierno de los "hijos de machepa".
El gobierno de Bosh
El gobierno de Juan Bosh Hubiera tenido luces y sombras como todos los hechos históricos y generalmente las sombras enseñan mucho más que las luces. El legado que Juan Bosh planeó dejar era el nuevo acueducto de Santo Domingo. Un mega proyecto que implicaba nuevas tuberías en todas las calles de la ciudad y la lógica reconstrucción de las calles, dejar los túneles para el futuro metro en toda la ciudad y la represa para el abastecimiento del acueducto. Puedo recordar todas las componendas que comenzaron a moverse para que la corrupción lubricara todo el ensamblaje.
Hubiera sido el primer préstamo que pediría un país sin deudas y recién liberado de una odiosa dictadura lo que garantizaba su aprobación y también eran los mismos hijos de machepa que hoy gobiernan y que hubieran intentado actuar de igual manera pero con una gran diferencia, en ese momento todos nos sentíamos responsables por el futuro de la patria, en ese momento todos participábamos y hubiera sido la mejor práctica ciudadana de controlar a los que gobiernan desde la sociedad, hubiese sido el principio de la instauración de la REPUBLICA y sus mecanismos de controles.
En su aspecto político en solo siete meses se produjeron los mas fabulosos intento de manipular y embaucar a la sociedad: la guerra contra Haití y la fiera de Haina que hasta trajo famosos cazadores internacionales para cazar el esperpento fruto de la mente de un excelente cuentista con el objetivo de pasar desapercibida la aprobación de ciertas leyes como la de plusvalía que a pesar de ser justa sin explicar y convencer no tenía porque ser aceptada.
En el aspecto administrativo estaban desmontando toda la estructura gubernamental mediante la APLANADORA PRDista. Llegaban a cualquier oficina un grupo de personas de 10 o 15 e iban parando a los empleados de sus escritorios y sentando uno de los recién llegados sin más averiguación sobre sus competencias. No se necesita una gran imaginación para saber el resultado proyectado.
A mi juicio la figura y promesa boshista se hubiera destruido para sienpre con el fracaso de ese gobierno aunque hubiese dejado el nuevo acueducto y quizás la corrupción naciente hubiera sido condenada socialmente. No hubiera habido Manaclas. no hubiera habido guerra, no hubiera habido intervención, no hubiera habido Balaguer de nuevo y por supuesto no hubiera habido PLD. Es mi personal interpretación de lo que sucedió.
La intervención junto a la cobardía de Bosh que no quiso hacer campaña en el 66 trajo a Balguer de nuevo a la presidencia aceptado por la oligarquía no por ser Balguer sino por ser Ricardo.
Balguer y Bosh fueron las encarnaciones de egos sobre dimensionados por resentimientos de juventud con la diferencia de que Balaguer tenía la clase suficiente para ejercerlo y Bosh solo podía exigirlo de forma insolente en la mayoría de las veces. Y fue ese ego sobre dimensionado que motivó toda la obra de gobierno balaguerista para no solo competir y sobrepasar a Trujillo, sino para esculpir su nombre en la historia con su extraordinario legado que al final de su vida, teniendo muchos posibles sustitutos dentro de su parcela polؙtica prefirió levantar el brazo de Bosh para ser sustituido por los hijos de machepa honrando la frase del máximo resentimiento social "después de mi el diluvio".
Las lealtades al líder se transforman generalmente en servilismo genuflexo que impiden la critica interna que pudo rectificar errores o sembrar normas positivas para el futuro. Entonces nadie critico la corrupción que no cruzaba las puertas del despacho y que se desarrolló robustamente hasta lo que es hoy, nadie criticó las funditas que ahora se convirtieron en cheques multimillonarios para comprar consciencias, nadie critico las banderitas rojas en los vehículos militares para llegar al hoy donde los militares han perdido el honor y el valor mareados por el baile político y se pudiera seguir hablando de sangre y abusos como nunca vimos antes donde creció saludablemente la impunidad que hoy es dominante y descarada.
Sin embargo la nación está compuesta por todos, los oligarcas y los hijos de machepa que demostraron sin lugar a ninguna duda que no eran mejores que los oligarcas, al contrario llegaban con más hambre al poder y sin la necesidad de resguardar en apariencia un nombre.
Ante este panorama la única solución que puedo ver es la construcción de un dominicano nuevo contrario por consciencia a toda la herencia cultural de nuestros conquistadores como meta estratégica y como meta a corto y mediano plazo quitarle el congreso a los partidos políticos y encaminarnos a terminar con el régimen presidencialista.
Y ahora pregunto ¿es eso posible en la actual realidad geopolítica mundial?
Nuestra primera independencia fue parte de la misma realidad. Dice Frank Moya Pons en su Manual de Historia Pág. 213 lo siguiente: “En ese entonces ya Sánchez Ramírez había muerto y gobernaban la colonia interinamente el Coronel Manuel Caballero y el Lic. José Núñez de Cáceres, este último con el cargo de Teniente de Gobernador e Intendente Político”. Traemos este pasaje a colación para documentar que Núñez de Cáceres era parte del gobierno colonial y que cuando el 1 de Diciembre de 1821 declara la independencia del Haití Español, como le llamaron, (hoy le hubiéramos denominado un autogolpe) era con la clara intención de colocándose bajo el protectorado de La Gran Colombia, mantenerse en el poder sin cambios radicales en el orden social.
Dejaré el link y si alguien desea corroborar esta afirmación lo invito a verificarlo en la página del Instituto Dominicano de Genealogía Inc. en el siguiente link: https://www.idg.org.do/capsulas/octubre2005/octubre200515.htm.
Un ejemplo de discriminación fue confirmado arriesgadamente con las bolas negras que impidieron a Trujillo pertenecer al Centro de Recreo de Santiago y al Club Unión de Santo Domingo. Esa misma discriminación se volvió a manifestar contra Juan Bosh y su gobierno calificándolo de Oclocracia (gobierno de la plebe) al otro día de las primeras elecciones en muchas décadas. Bosh tampoco pertenecía a ningún apellido consagrado y ahora se me ocurre que tampoco Juan Pablo Duarte ni Ramón Matías Mella y muchísimo menos Francisco del Rosario Sánchez a quienes no se les permitió gobernar. Siempre he sostenido que las diferencias entre el norte y el sur de América se originaron en que el primero fue colonizado y el segundo fue conquistado pero hay otra gran diferencia, los peregrinos que emigraron a Norteamérica fueron los perseguidos, los que sufrieron las represiones del poder aristocrático y religioso de Europa, en el sur llegaron los que pertenecían a esa aristocracia o simplemente aspiraban a pertenecer. Los primero no querían que se repitiera la situación opresiva mientras en el sur se quería perpetuar.
Antes de que Bosh tomara posesión se inició el plan para derrocarlo. Un golpe de estado ejecutado a los 7 meses y que gracias al viciado análisis de las izquierdas revolucionarias lograron exculpar y mantener la vigencia política del sector golpista ya que en su eterno esfuerzo de culpar al enemigo designado, el imperialismo yankee, se le atribuyo la culpa del atropello contra la legalidad y la democracia siendo falso. El sector golpista se tomo el trabajo y la inversión de recursos en una campaña que se llamó Mítines de Reafirmación Cristiana dirigidos a convencer, no a ellos mismos ni a los militares que ya estaban convencidos y mucho menos al pueblo cuya voluntad no contaba para ellos, sino al gobierno de Kennedy de que el pueblo temía la instauración del comunismo tal como acababa de ocurrir en la Cuba fidelista y convencieron al gobierno norteamericano de aceptar su tropelía y romper el orden democrático legal.
Esa acción trajo lógicamente una reacción contraria en defensa del legítimo proceso institucional de la nación que todos aspirábamos, un movimiento cívico militar cuya única finalidad fue reponer a Juan Bosh en la presidencia, movimiento dirigido por José Francisco Peña Gómez y algunos dirigentes del PRD. Es necesario dejar constancia de que la izquierda revolucionaria estuvo completamente al margen de la conjura y también es necesario decir que si la palabra revolución hubiese estado presente en las negociaciones no se hubiera conseguido el respaldo militar.
El plan era simple traer a Bosh desde Puerto Rico y ya reinstalado en el palacio invocar el respaldo de los organismos internacionales para el gobierno legítimo.
Debo mencionar que todo el movimiento fue acelerado extemporáneamente por otra conspiración neo trujillista que planeaba restaurar al presidente designado por Trujillo y derrocado por el pueblo en 1961 Joaquín A. Balaguer Ricardo.
En ese punto histórico Juan Bosh haciendo galas de su cobardía característica se negó a regresar en el avión militar que se envió a buscarlo y ese acto de traición a los planes acordados permitió que otro sector militar reaccionara originando la guerra civil de 1965 que trajo como consecuencia directa la intervención militar norteamericana.
La izquierda revolucionaria lógicamente se integró a lo que se convirtió en un movimiento armado del pueblo transformado en guerra patria por la intervención y rebautizaron de nombre una guerra civil en una nunca pensada revolución de abril. Un acto de oportunismo comprensible en la década del 60 donde cualquier liberación era asociada con la revolución y más aún con la sangre todavía fresca del masacrado levantamiento del 1J4 en las Manaclas comandado por una de las figuras más destacada y carismática en la lucha contra la tiranía primero y contra el golpe de estado después, Manolo Aurelio Tavares Justo
Esa transformación oportunista de la guerra civil a guerra revolucionaria tuvo consecuencias: estigmatizó como comunistas a los militares patriotas que participaron en la conjura sin serlos, hecho que conllevó a su persecución internacional y eliminación física de la mayoría y más importante eliminó cualquier ascendencia de la sociedad civil sobre el sector militar, dicho de otra forma alejó a los militares de cualquier compromiso social. Ningún militar se volverá a casar con la gloria.
El sector oligárquico cometió errores contra el proceso legítimo, un error grave y producto de la ceguera generada por su odio personal a Trujillo fue asumir que todo el pueblo estaba contra Trujillo siendo falso, lo que originó la hábil respuesta de Juan Bosh del "borron y cuenta nueva" que lo llevó a un triunfo casi imposible para establecer el gobierno de los "hijos de machepa".
El gobierno de Bosh
El gobierno de Juan Bosh Hubiera tenido luces y sombras como todos los hechos históricos y generalmente las sombras enseñan mucho más que las luces. El legado que Juan Bosh planeó dejar era el nuevo acueducto de Santo Domingo. Un mega proyecto que implicaba nuevas tuberías en todas las calles de la ciudad y la lógica reconstrucción de las calles, dejar los túneles para el futuro metro en toda la ciudad y la represa para el abastecimiento del acueducto. Puedo recordar todas las componendas que comenzaron a moverse para que la corrupción lubricara todo el ensamblaje.
Hubiera sido el primer préstamo que pediría un país sin deudas y recién liberado de una odiosa dictadura lo que garantizaba su aprobación y también eran los mismos hijos de machepa que hoy gobiernan y que hubieran intentado actuar de igual manera pero con una gran diferencia, en ese momento todos nos sentíamos responsables por el futuro de la patria, en ese momento todos participábamos y hubiera sido la mejor práctica ciudadana de controlar a los que gobiernan desde la sociedad, hubiese sido el principio de la instauración de la REPUBLICA y sus mecanismos de controles.
En su aspecto político en solo siete meses se produjeron los mas fabulosos intento de manipular y embaucar a la sociedad: la guerra contra Haití y la fiera de Haina que hasta trajo famosos cazadores internacionales para cazar el esperpento fruto de la mente de un excelente cuentista con el objetivo de pasar desapercibida la aprobación de ciertas leyes como la de plusvalía que a pesar de ser justa sin explicar y convencer no tenía porque ser aceptada.
En el aspecto administrativo estaban desmontando toda la estructura gubernamental mediante la APLANADORA PRDista. Llegaban a cualquier oficina un grupo de personas de 10 o 15 e iban parando a los empleados de sus escritorios y sentando uno de los recién llegados sin más averiguación sobre sus competencias. No se necesita una gran imaginación para saber el resultado proyectado.
A mi juicio la figura y promesa boshista se hubiera destruido para sienpre con el fracaso de ese gobierno aunque hubiese dejado el nuevo acueducto y quizás la corrupción naciente hubiera sido condenada socialmente. No hubiera habido Manaclas. no hubiera habido guerra, no hubiera habido intervención, no hubiera habido Balaguer de nuevo y por supuesto no hubiera habido PLD. Es mi personal interpretación de lo que sucedió.
La intervención junto a la cobardía de Bosh que no quiso hacer campaña en el 66 trajo a Balguer de nuevo a la presidencia aceptado por la oligarquía no por ser Balguer sino por ser Ricardo.
Balguer y Bosh fueron las encarnaciones de egos sobre dimensionados por resentimientos de juventud con la diferencia de que Balaguer tenía la clase suficiente para ejercerlo y Bosh solo podía exigirlo de forma insolente en la mayoría de las veces. Y fue ese ego sobre dimensionado que motivó toda la obra de gobierno balaguerista para no solo competir y sobrepasar a Trujillo, sino para esculpir su nombre en la historia con su extraordinario legado que al final de su vida, teniendo muchos posibles sustitutos dentro de su parcela polؙtica prefirió levantar el brazo de Bosh para ser sustituido por los hijos de machepa honrando la frase del máximo resentimiento social "después de mi el diluvio".
Las lealtades al líder se transforman generalmente en servilismo genuflexo que impiden la critica interna que pudo rectificar errores o sembrar normas positivas para el futuro. Entonces nadie critico la corrupción que no cruzaba las puertas del despacho y que se desarrolló robustamente hasta lo que es hoy, nadie criticó las funditas que ahora se convirtieron en cheques multimillonarios para comprar consciencias, nadie critico las banderitas rojas en los vehículos militares para llegar al hoy donde los militares han perdido el honor y el valor mareados por el baile político y se pudiera seguir hablando de sangre y abusos como nunca vimos antes donde creció saludablemente la impunidad que hoy es dominante y descarada.
Sin embargo la nación está compuesta por todos, los oligarcas y los hijos de machepa que demostraron sin lugar a ninguna duda que no eran mejores que los oligarcas, al contrario llegaban con más hambre al poder y sin la necesidad de resguardar en apariencia un nombre.
Ante este panorama la única solución que puedo ver es la construcción de un dominicano nuevo contrario por consciencia a toda la herencia cultural de nuestros conquistadores como meta estratégica y como meta a corto y mediano plazo quitarle el congreso a los partidos políticos y encaminarnos a terminar con el régimen presidencialista.
Y ahora pregunto ¿es eso posible en la actual realidad geopolítica mundial?
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